INNOVA Research Journal 2018, Vol 3, No. 12, pp. 78-98
mineros (5.4%), madera (4.8%), elaborados de banano (3.1%), manufacturas de cuero, plástico y
caucho (2.9%); químicos y fármacos (2.8%), jugos y conservas de frutas (2.3%), fruta (2.1%),
harina de pescado (1.8%), tabaco en rama (1.4%); manufacturas de papel y cartón (1.2%); y,
otros (19.1%) (Banco Central del Ecuador, 2018).
Durante el período enero – mayo de 2018, las importaciones totales en valor FOB
alcanzaron USD 8,807.7 millones, nivel superior en USD 1,674.4 millones en relación con las
compras externas realizadas en similar período de 2017 (USD 7,133.2 millones), lo cual
representó un aumento de 23.5%. De acuerdo a la Clasificación Económica de los Productos por
Uso o Destino Económico (CUODE), en el cuadro se aprecia que al comparar los meses enero –
mayo de 2017 y 2018, las importaciones en valor FOB, fueron mayores en los grupos de: bienes
de consumo (34.7%); combustibles y lubricantes (34%); bienes de capital (27.6%); materias
primas (10.1%); y, productos diversos (36.8%) (Banco Central del Ecuador, 2018).
Resultados
(Mathews, 2016) indica que China consume la mayor cantidad de recursos del mundo y
de la misma manera produce la mayor cantidad de desechos, pero también tiene las soluciones
más avanzadas. El nuevo distrito de Suzhou fue uno de los primeros parques industriales en el
programa de Economía Circular de China. El uso de recursos de la nación es ineficiente. En
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014, China generó 3.200 millones de toneladas de desechos sólidos industriales, de los cuales
solo 2.000 millones de toneladas se recuperaron mediante el reciclaje, el compostaje, la
incineración o la reutilización. Otros estudios han demostrado que el 46% (en peso) de los
residuos plásticos post-consumo recolectados para el reciclaje en la UE se exporta, la mayor
parte al Lejano Oriente, donde en el pasado cercano puede haber sido reprocesado en
instalaciones con protección ambiental deficiente, por trabajadores mal pagados en condiciones
insalubres. (Iacovidou, y otros, 2017).
China ha sabido hacer frente a estos problemas de sobrexplotación y ya dispone de
importantes marcos legislativos centrados en la Economía Circular (EC). Tres cuartas partes de
los principales parques industriales de China, por ejemplo, deben implementar prácticas de EC
bajo el actual plan quinquenal del gobierno. Una mejor gestión de los recursos naturales es un
componente clave de la erradicación de la pobreza, la mitigación del cambio climático y el
crecimiento económico resiliente. Las prácticas más eficientes podrían reducir las emisiones de
gases de efecto invernadero en un 60 por ciento para 2050. (National Development and Reform
Commission, 2016)
En la práctica, hay un enfoque de tres etapas para implementar EC. Esta metodología se
basa en gran medida en teorías de Cleaner Production (CP), ecología industrial y modernización
ecológica. Las empresas son requeridas o estimuladas para llevar a cabo la auditoría del CP. Para
empresas altamente contaminantes, CP es obligatorio. Desafortunadamente, la tasa de auditoría
de CP en China es aún muy baja desde que entró en vigor la Ley de Promoción de Producción
Más Limpia en 2003. Sin embargo, las empresas que realizan encuestas tienden a buscar
auditorías de CP porque, al mejorar su desempeño ambiental, les ayuda evitar la divulgación en
los medios locales. Se requieren oficinas locales de protección ambiental para establecer un
sistema de divulgación pública en el que todas las empresas estén divididas en cinco categorías:
Revista de la Universidad Internacional del Ecuador. URL: https://www.uide.edu.ec/
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