INNOVA Research Journal 2018, Vol 3, No. 6, pp. 66-83
Introducción
El nuevo colaborador debe sentirse bien recibido y cómodo, parte del equipo de trabajo y
comprender de manera general aspectos claves de la organización a la que ingresa. Es necesario
brindar al colaborador las herramientas necesarias para que conozca la manera en cómo la
empresa actúa y hace las cosas. Por esta razón, el departamento de talento humano debe brindar
una correcta orientación para que pueda desempeñarse con efectividad. En este caso es necesario
brindarles una inducción ofreciendo información importante de la Institución y sus actividades, a
fin de que se adapten con facilidad a la misma.
Dentro de la cultura corporativa de las organizaciones, que incluyen el área de talento
humano la cual enfrenta la realidad intangible pero inevitable de una cultura y fisionomía propia,
por lo que implica integrar con eficacia y rapidez a los nuevos miembros que ingresen a la
organización. Es por este motivo que en la dinámica del desarrollo del proceso de inducción, se
ha evidenciado que un programa de socialización logra su objetivo en la medida que se consigue
acelerar la incorporación de nuevos colaboradores en beneficio de las organizaciones. (Werther,
2
000, pp.221-225).
Las organizaciones deben ofrecer oportunidades de involucramiento en los colaboradores
para que estos puedan desarrollar un sentido de pertenencia y compromiso con la organización y
sus actividades. La palabra “pertenecer” se relaciona con compromiso, es decir si el colaborador
se apropia de los objetivos y valores organizacionales, su compromiso con la organización será
mayor. (Alles, 2008, p.36). Por esta razón el no contar con un proceso de inducción de personal
puede desencadenar en falta de compromiso y sentido de pertenencia en los colaboradores.
Por otro lado, la ausencia de una herramienta para optimizar el proceso de inducción o
también conocido como socialización, eleva el nivel de ansiedad y tensión que generalmente
siente un ser humano al iniciar sus actividades laborales en una nueva organización, el
colaborador debe sentirse bien recibido desde su primer día. (Dessler, 2009, p.291).
La gestión del talento humano en las organizaciones centra su atención en el desarrollo de
procesos que eleven la satisfacción de sus colaboradores. El proceso de inducción de acuerdo a
varios estudios realizados, ha permitido reducir el nivel de ansiedad y tensión que presentan los
colaboradores al ingresar a un nuevo ambiente de trabajo, garantizando una adaptación rápida y
confortable.
De acuerdo a Werther (2000, p.195) el índice de rotación y compromiso en colaboradores
son causas de fenómenos internos de la organización como: su cultura organizacional, política
disciplinaria de la organización, beneficios, condiciones físicas de trabajo. Estos fenómenos son
expresados en un proceso de inducción.
Teniendo en cuenta este aspecto, es importante desarrollar una herramienta de inducción
para el personal que permita informar aspectos relevantes de la institución, así como también
incrementar el grado de compromiso y sentido de pertenencia por parte de los colaboradores.
Método
Revista de la Universidad Internacional del Ecuador. URL: https://www.uide.edu.ec/
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