INNOVA Research Journal 2017. Vol. 2, No.10 pp. 132-146
Las emociones
Según Goleman (2005), las emociones son, en esencia, impulsos que llevan a actuar,
planes de acción instantáneos para conducirnos en la vida que la evolución ha dotado. Según
Manucci (2016) las emociones básicas son “reacciones corporales espontaneas que se activan
para enfrentar determinadas situaciones” (p. 60). En la Tabla 1, se resumen las reacciones
básicas presentes en el ser humano, aunque no todos los autores coinciden con la cantidad y
variedad de los mismos, para el presente trabajo se identificarán los ocho fundamentales (la ira,
el miedo, la tristeza, la alegría, el amor, la sorpresa, la aversión y la vergüenza). Las emociones
se caracterizan por ser ocasionadas en un evento específico, su duración es muy breve, son
numerosas, por lo general van acompañadas de distintas expresiones faciales y están orientadas a
la acción.
Tabla 1
No
1
2
3
4
5
6
7
8
Emoción
Ira
Tristeza
Miedo
Alegría
Amor
Sorpresa
Aversión
Vergüenza
Manifestación
Rabia, enojo, resentimiento, furia, irritabilidad
Aflicción, pena, desconsuelo, pesimismo, melancolía
Ansiedad, aprensión, temor, preocupación, angustia
Felicidad, gozo, tranquilidad, contento, deleite
Aceptación, cordialidad, confianza, amabilidad, afinidad
Sobresalto, asombro, desconcierto, admiración
Desprecio, desdén, displicencia, asco, antipatía, disgusto
Culpa, perplejidad, desazón, remordimiento, pesar
Nota. Adaptado de Goleman (2005).
Las emociones están presentes en las acciones de los docentes, lo que lleva a reconocer su
influencia en la acción educativa. Los procesos enseñanza-aprendizaje se sustentan en la
comunicación, a la vez que en los procesos comunicativos se transmiten ideas, emociones,
pensamientos y sentimientos. En las personas, las emociones pueden preceder o presentarse al
mismo tiempo que los pensamientos o al contrario los pensamientos pueden activarlas.
Los sentimientos son estados del sujeto, caracterizados por contener emociones y
pensamientos, se expresan a través de un relato. Para Manucci (2016), el paisaje interior de una
persona representa su propia imagen de la realidad se enmarca en dos dimensiones: una es
emocional y la otra simbólica como los pensamientos que les dan significado a los hechos y
justifican las posiciones personales. El paisaje interior se limpia cuidando los relatos o escenas.
Según Robbins y Judge (2009) los estados de ánimo “suelen ser menos intensos que las
emociones y carecen de estímulo contextual” (p. 251), duran más que las emociones, son de
naturaleza cognitiva, su componente dominante es físico, psíquico y ambiental, siendo más
manejables. Las emociones negativas como la ira, tristeza, miedo pueden traducirse en estados
de ánimo negativos, en cambio emociones positivas como la alegría y el amor pueden traducirse
en estados de ánimo positivos. Para la mayoría de personas, los estados de ánimo positivo son
más comunes que los negativos, como también recuerdan las experiencias negativas con más
facilidad que las positivas. Finalmente, en una organización, el estado de ánimo de sus miembros
influye en su desempeño en el trabajo.
Sistemas Adaptativos complejos (SAC)
Revista de la Universidad Internacional del Ecuador. URL: https://www.uide.edu.ec/
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