INNOVA Research Journal 2017. Vol. 2, No.8.1 pp. 174-193
Endosulfan
Metamidofos
Parathion
600
240
160
-0.105
-0.602
-0.445
-0.905
-0.696
-0.754
6.4
1.1
1.5
61.3
9.2
11.2
En el caso de los compuestos orgánicos contaminantes, estos son degradados en el propio
lugar de depósito, absorbidos y después de degradados,- “secuestrados” y algunos volatilizados;
todo esto en dependencia de la complejidad de su estructura química, grupo funcional y
presencia y complejidad de anillos aromáticos tipo benceno, antraceno etc., lo cual hace más
lento y prolongado el proceso cinético de biodegradación [15].
Todos estos procesos pueden ser modificados, en oportunidades acelerados mediante
manejo de factores agroecológicos, entre ellos: abióticos (condiciones edafoclimáticas), tales
como relacionadas con el clima, las temperaturas, la humedad relativa, las precipitaciones y su
frecuencia, el rocío, la intensidad luminosa directa o difusa, y en cuanto a las condones edáficas,
las propiedades físicas, químicas y biológicas del suelo, como textura y estructura del suelo,
grado de compactación, tipo de suelo arenoso o arcilloso, pH del suelo, y muy importante entre
los factores bióticos la composición de la flora microbiana diversa y abundante; la biodiversidad
de flora y fauna tanto macro y microbiológica, la fertilidad de los suelos, el contenido en materia
orgánica (ácidos húmicos); respecto al factor filogenético dependerá cuan más activa sea la
capacidad bioquímica metabólica de les especies botánicas para participar en los procesos
biodegradativos en simbiosis con los microorganismos rizosféricos asociados; de esta propiedad
dependerá la capacidad fitoremediadora tanto de las especies de plantas como de los
microorganismos asociados, que le permitirán actuar en suelos con diferentes pH, salinidad y
humedad. Por último, el factor antropogénico, mediante la conducción de medidas tendientes a la
mejora y conservación de los suelos como el arrope, siembra de coberturas vivas, y abono verde
como el caso de leguminosas plantas fijadoras de nitrógeno, manejo de arvenses y vegetación
espontánea, el barbecho, la rotación de cultivos, laboreo mínimo del suelos, construcción de
canales de drenaje, son medidas constructivas del hombre que propician condiciones favorables
para biodegradación y en particular, la Fito remediación de substratos contaminados [6].
Es oportuno distinguir, que en el caso de los compuestos inorgánicos, no pueden ser del
todo degradados, sin embargo pueden ser “estabilizados” en el suelo y “secuestrados” en tejidos
colectables y más importante aún, atrapados por microorganismos simbiontes rizosféricos como
las Micorrizas, sobre todo por las especies conocidas como MVA (micorrizas-vesículo-
arbusculares), que atrapan del suelo estos minerales y los transportan desde grandes distancias a
las plantas y el resto lo fijan en sus estructuras vesiculares donde se producen enzimas capaces
de utilizar estos compuestos en la síntesis de hormonas de crecimiento a base de auxinas,
giberelinas y citoquinas [16-19]. En estas estructuras de empalizadas conformadas por hifas
reproductivas de estos hongos, se alojan estos compuestos muchos de los cuales se transforman
en kairomonas con efecto repelentes de plagas y nematodos, otras conducen a la capacidad de
algunas plantas de inhibir el crecimiento de otras especies en su entorno (alelopatía) y otras
potencian por sinergia la capacidad fitoremediadora del sistema seto-MVA [19].
En sentido general, la forma más simple de Fito remediación es la natural, ya que los
procesos involucrados, ocurren de forma espontánea, en cierta medida, de forma natural, sólo
que dependerá de su capacidad fitoremediadora para ser considerada válida, para ser aplicada de
forma inducida como un sistema biotecnológico Fito remediador [8,16].
Revista de la Universidad Internacional del Ecuador. URL: https://www.uide.edu.ec/
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