INNOVA Research Journal 2017, Vol 2, No. 2, pp.55-61.
política. Finalmente, la decisión de los financiadores de apoyar los procesos; de los funcionarios
de ir más allá de sus propósitos misionales; así como el constante intercambio con las cortes,
otras instituciones y Ongs defensoras de las víctimas, configuraron un mapa de relaciones y
tácticas que no solamente produjo resultados en materia de protección, sino que facilitó el
camino que puso en marcha la restitución.
Todo esto ocurre en un entorno político desfavorable, lo cual permitió mostrar cómo los
mecanismos legales son un producto de varias lógicas de gubernamentalidad que se superponen.
El caso evidencia cómo las decisiones políticas sobrepasan las instituciones públicas y muestra
que detrás de las estrategias de cada actor hay intereses particulares, ya sean personales (de los
funcionarios y activistas), locales (de las instituciones, las ONGs, las organizaciones de
víctimas) o globales (de los organismos financiadores y de las cortes internacionales). La
configuración de intereses de múltiples actores pasa por encima del hecho que no existiera
voluntad política y, en un aspecto más amplio, refleja la incapacidad del poder político del
Estado de mantener una unión, una coherencia entre las prácticas de sus instituciones (Abrams,
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988). En últimas, en el sentido de Sharma y Gupta, el Estado empieza a estar conformado por
una “estructura híbrida que trasciende los límites entre arenas estatales y no estatales” (Sharma y
Gupta 2006: 16).
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Estos son, a muy grandes rasgos, los resultados de la investigación , que pretendía llegar
hasta la formulación de la Ley 1448. Pero la ley y particularmente su capítulo sobre restitución
de tierras cambiaron por completo el panorama del PPTP, transformándolo en URT. De esta
manera, mientras hacíamos el trabajo de campo para reconstruir la historia del PPTP, este iba
desapareciendo y transformándose en un enorme aparato institucional (de 159 funcionarios
pasaron a más de 1500 en cuestión de dos años). Lo interesante de este ejercicio fue asistir el
proceso por el cual el Estado institucionaliza una política y vivir en carne propia, los agites,
intrigas y decepciones que implicó esta transformación.
Por una parte, este proceso nos tomó por sorpresa; empezamos a trabajar el tema en el
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010 por el interés de una estudiante que quería hacer su tesis sobre algo relacionado con el
PPTP. Preparamos la propuesta y cuando estaba lista sale la Ley 1448; esto implicó un revuelo
importante y de la noche a la mañana el tema que estábamos trabajando se convirtió en titular de
todas las noticias. Empezamos nuestras primeras aproximaciones al proyecto, justo a finales del
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011, cuando en el PPTP estaban corriendo para redactar los decretos reglamentarios para la
restitución. Nuestras primeras entrevistas en 2012 las realizamos en pleno cambio viendo todo el
movimiento; funcionarios que salían, otros que volvían y el estupor y trabajo desmedido de un
grupo de personas que le pusieron el cuerpo y el alma a este proceso y que quedo registrado a lo
largo de nuestras grabaciones. Ya con lo que sabíamos del proyecto y observando esta situación,
no podíamos más que admirarnos de la labor de los funcionarios. El valor de los instrumentos de
la etnografía fue incalculables para entender el proceso y para la observación.
Sin embargo, esta transformación fue también dolorosa en varios aspectos: las
condiciones laborales cambiaron, la gestión se volvió la del Estado y la URT empezó a ser el
blanco de intrigas políticas, de duros cuestionamientos y excesivo control de actores estatales y
no estatales. Ya en 2014, con la URT andando, los funcionarios a nivel nacional se quejaban de
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Para más detalle ver Rodríguez y Estrada (2014), Rodríguez y Estrada (2015).
Revista de la Universidad Internacional del Ecuador. URL: https://www.uide.edu.ec/
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